🗞️ Zoociedad Anónima
El gobierno no le teme a la violencia; le teme a la verdad.
Por: Ramón Alberto Reyes Viveros
⸻
I. La Presidenta que sabía marchar
A veces pienso que la Presidenta olvidó quién era.
En 1999, cuando miles de jóvenes tomaron la UNAM para defender la gratuidad y muchos otros derechos, Claudia Sheinbaum se solidarizó con ellos. Denunció que la Rectoría había comprado medios para estigmatizarlos. Se indignó por la represión. Defendió la protesta estudiantil.
Era una mujer firme, crítica y valiente frente al poder.
No era la Presidenta que hoy acusa a la Generación Z de ser “manipulada”, “pagada” y parte de una conspiración internacional digna de un panfleto soviético.
No era la mujer que hoy se rodea de funcionarios que jamás han leído un libro de historia, pero que la convencen de que un movimiento juvenil —genuino, indignado y espontáneo— puede reventarse con un montaje torpe, perfectamente visible desde cualquier ángulo.
Yo la conocí en 2013, en un evento de medio ambiente y cambio climático en el Castillo de Chapultepec.
Era integrante del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC), aquel que ganó el Premio Nobel de la Paz en 2007. Ocupé un lugar junto a ella: había sido secretaria de Medio Ambiente del Distrito Federal y yo era subsecretario de la misma área en el gobierno de Veracruz. Me pareció una mujer técnica, seria, respetuosa, guiada por la ciencia.
Me pregunto: ¿Dónde quedó la Doctora Claudia?
⸻
II. El gobierno que sabe todo (pero no entiende nada)
Este gobierno presume saberlo todo:
que sabe quién convoca, quién financia, quién tuitea, quién marcha, quién critica, quién molesta; tiene analistas y gráficas para explicarlo todo; incluso tiene sus propios datos, pero ahora avalados por Milenio, La Jornada, SDP, Sin Embargo o alguna de las decenas de televisoras del gobierno, como Canal 11 o las estatales, que han perdido todo, desde el presupuesto hasta la dignidad.
Pero lo único que no sabe es escuchar.
Frente al asesinato de Carlos Manzo —un joven alcalde de 37 años, también de la Generación Z, padre de familia, valiente y profundamente querido en su tierra— la Presidenta decidió mirar hacia otro lado.
Cuando la indignación juvenil crecía, cuando la rabia era legítima, humana y justa… vino la orden del palenque al enano del tapanco:
—Desvía el tema.
—Cambia la conversación.
—Criminaliza a quien protesta.
Pero el montaje falló y la damnificada políticamente es Claudia.
⸻
III. Los Halcones del siglo XXI
Basta una cita —una sola— del análisis de Raymundo Riva Palacio:
“El Bloque Negro nació en las entrañas del obradorismo radical y ha sido financiado desde la Secretaría de Gobierno de la CDMX.”
Lo demás lo hace la evidencia:
• Guardias Nacionales vestidos de civil descendiendo de un vehículo militar, a quienes yo mismo grabé en la avenida Ribera de San Cosme, casi esquina con Insurgentes.
• Vallas retiradas en puntos estratégicos, no solo el 15 de noviembre, sino también el 2 de octubre. Y qué decir del retiro de esas mismas vallas el día de la aprobación en el Senado de la República de la reforma judicial, lo que hizo trasladar la sesión al antiguo recinto de Xicoténcatl, entre otros ejemplos que he documentado.
• Encauzamiento del contingente hacia zonas propicias al caos el 15 de noviembre, al cerrar los accesos al Zócalo capitalino, y el encapsulamiento de un centenar de jóvenes el 20 de noviembre con granaderos.
• El Bloque Negro apareciendo justo donde la multitud se comprimía, algunos brincando la valla desde Palacio hacia el Zócalo e ingresando por laterales antes bloqueadas para los manifestantes pacíficos, y después la orden de atacar y reprimir a los granaderos, que según usted no existen, como no existe mucho del México que nos cuenta a diario.
Fue una coreografía.
Una puesta en escena.
Pero mal dirigida, donde incluso la jefa de Gobierno y su inútil secretario le han trasladado a usted la responsabilidad.
Porque esta vez no se enfrentaban a un grupo de ciudadanos cansados, sino a una generación entera que sabe grabar, documentar, archivar, comparar, viralizar… y entender que no es a la violencia a lo que su gobierno le teme: es a la verdad.
La Generación Z no es manipulable: creció sin miedo y sin apego a la televisión.
⸻
IV. La prensa revela lo que el gobierno dictador calla
La investigación que realicé en medios de comunicación nacionales e internacionales es demoledora.
No fueron jóvenes descontrolados.
No fue la “extrema derecha”.
No fue TikTok ni la CIA ni Azteca, menos los partidos de oposición.
Fueron los mismos de siempre:
18 grupos anarquistas detectados por el CNI y la Sedena desde 2014.
Siete de ellos radicales, reincidentes, con historial de incendios, agresiones, explosivos, ataques a la policía, narcomenudeo y violencia escolar.
Entre ellos:
• Okupache
• Instinto Salvaje
• Cruz Negra Anarquista
• Coordinadora Estudiantil Anarquista
• Comités Libertarios de Prepas 3, 7 y CCH Oriente
Fueron ellos quienes en 2014 incendiaron la Puerta Mariana de Palacio Nacional.
Fueron ellos quienes provocaron disturbios en Ayotzinapa.
Fueron ellos quienes atacaron la UNAM, la Rectoría, el Metrobús, a maestros, a estudiantes, a policías…
Fueron ellos quienes aparecieron misteriosamente en la marcha del 15 de noviembre.
Y como lo dijo un analista en El Universal:
“Estos grupos son funcionales para desacreditar protestas sociales.”
La pregunta no es quién los dejó actuar.
Es quién los llamó…
…y por qué en las manifestaciones de Morena y en sus mítines gubernamentales no aparecen nunca.
No hoy, sino desde que gobiernan la CDMX.
⸻
V. El montaje que fracasó
Presidenta Sheinbaum:
Usted quiso borrar el nombre de Carlos Manzo.
Quiso que la conversación se fuera hacia los “violentos”, los “radicales”, los “manipulados”.
Pero la violencia que vimos no fue orgánica.
Fue inducida.
Fue permitida.
Fue ruin, porque hizo pelear a mexicanos contra mexicanos.
Fue útil…
hasta que dejó de serlo.
La declaración del abogado de varios de los jóvenes detenidos, consignados y vinculados a proceso sin evidencia, el 20 de noviembre, con Azucena Uresti en Radio Fórmula, lo evidencia:
los antimotines confrontaron al Bloque Negro para ahuyentar a la ciudadanía pacífica, que se expresaba como lo hacían en 1988 con Cárdenas Solórzano: en contra de la autocracia, con sus niños de la mano y con la ilusión de que, en vez de gas lacrimógeno, saliera un mensaje de su Palacio, símbolo de paz y entendimiento.
Pero a lo que usted ha llamado en sus conferencias “contención” es provocación.
Eso es manipulación del espacio público.
Eso es usar el miedo como herramienta de gobierno.
García Luna (a quien usted tanto aclama) hacía montajes para impresionar a Loret.
Usted los hace para intentar controlar a la Generación Z y encubrir la corrupción de los suyos.
La diferencia es que a usted el montaje le salió mal.
⸻
VI. Un gobierno que desperdicia su tiempo
Presidenta, usted fue científica.
Usted fue manifestante.
Usted marchó.
Usted reclamó la utilización de dinero público y medios de comunicación que estigmatizaban a los jóvenes, de granaderos que reprimieran la disidencia.
Hoy es usted quien repite ese viejo guion.
Es usted quien revive el discurso de Díaz Ordaz.
Es usted quien usa a grupos violentos para manchar protestas pacíficas.
Es usted quien gobierna rodeada de corruptos, ineptos y aduladores que están quemando su legado día con día.
Le recuerdo unas palabras de Ildefonso Guajardo al presidente Peña Nieto, al calor de la negociación del TLCAN:
“Presidente, finalmente el electo es usted y usted es el responsable. Yo no soy más que un instrumento. Si usted quiere, dele atribuciones al canciller y le presento mi renuncia.”
A lo que Peña Nieto contestó:
“Al presidente de México no se le amenaza.”
Cita con la que estoy de acuerdo.
Y le pregunto a usted:
¿Cuántos funcionarios —o incluso la misma jefa de Gobierno— le han demostrado la lealtad que Guajardo le demostró a Peña, sabiendo que la decisión que estaba por tomar podía fracasar?
Espero que reflexione sobre la capacidad de su equipo, porque la electa es usted.
⸻
VII. La verdad incómoda
Presidenta:
La violencia no la asusta porque la controla.
La verdad sí, porque ya no puede esconderla.
El país que usted describe no existe.
El que existe es este:
— Un joven alcalde asesinado.
— Una generación harta.
— Un gobierno que provoca violencia para ocultar temas.
— Un México que ya no quiere miedo ni montajes.
— Un pueblo que aprendió a documentarlo todo.
Los jóvenes no son su enemigo.
Su enemigo es su propio gobierno y quienes la mantienen maniatada.
Claudia:
No desperdicie su oportunidad histórica defendiendo a los peores.
No traicione a la mujer que fue ni a las miles de mujeres que quieren —y tienen— la capacidad de llegar a donde usted está hoy.
No subestime a la generación que viene: es tan fuerte y tan inteligente como la que usted representó algún día, pero con la salvedad de que está más informada y la inmediatez es su medida predilecta.
Porque los jóvenes —a diferencia de quienes la rodean— sí saben lo que están haciendo.
¿Y usted?
⸻
