Perfilando
* Anilú, se va.
Por Iván Calderón
Después de su
fracaso electoral de la mano de Miguel Ángel Yunes Linares, el PRI veracruzano
se encuentra viviendo la más infame de sus crisis.
La neta.
Cuando en el
PAN-PRD y en MORENA ya tienen a sus elegidos, son los tricolores quienes aún no
saben el destino de este partido, ni mucho menos quién será su candidato a
Gobernador.
“Al cuarto
para las doce” cuando todo debería de estar resuelto y planchado, nadie sabe,
nadie supo.
Ante esto,
los principales actores políticos priistas, ya sean de la aldea o de altiplano,
deberán de optar en breve por el orden, la unidad, pero sobre todo por la
disciplina partidista.
Lejos de
altercados, o de voluntades histriónicas, la salomónica decisión en torno a la
candidatura debe de darse de una vez por todas y no esperar hasta la fecha de
la convocatoria que será más o menos por el 26 de diciembre, ya que entre más
tiempo pasan sin definiciones, la brecha de oportunidad se delimita ante sus
adversarios que van caminando, operando, pactando y acordando a pasos
agigantados.
Y es que todo
parece indicar que en el PRI las cosas están como si fuera la noche después de
su derrota. El contexto es el mismo, todo muy confuso, en las tinieblas.
Mientras esto
pasa, Pepe sabiamente espera y Héctor no suelta prenda.
Es cierto,
dentro del PRI se pondera la vida democrática, pero indudablemente esta
agonizante expectativa está incendiando los ánimos entre los operadores de
tierra y lejos de beneficiar a la vida pública de este instituto político, lo
mancillan aún más.
Se tiene que
decir, si es que no llegan a un consenso, los priistas de Veracruz soportaran
en el próximo año su segunda derrota, que tendedera a doler aún más, ya que
Duarte no será culpable, si no quienes con su terquedad hunde el barco de sus
posibilidades.
Los
diferentes sectores de la sociedad ya están fastidiados de esta risible
telenovela y más aun de los caprichos y las actitudes vetustas de Yunes Landa,
que en honor a la verdad puede ser el gran culpable de esta irracional
segmentación.
Hay que
decirlo, no es necesario rasgarse las vestiduras o seguir con esta guerra sin
cuartel. Aunque los de arriba no lo ven, los priistas de a pie, los que
defienden a capa y a espada este partido así lo están percibiendo, ya están
llegando al borde del fastidio.
Héctor Yunes
continúa empecinado a producto de gallina en ser el candidato y Pepe quién no
se baja del barco, ha fortalecido últimamente su posicionamiento generando
mayores expectativas entre la clase veracruzana siendo una autentica opción.
¿Pepe o
Héctor? Para los rojos esa es la pregunta del millón.
Al final
alguien tendrá que ceder.
Esperemos y
no sea demasiado tarde.
Falta muy
poco para la decisión final.
POR CIERTO, ha
trascendido que la delegada de federal de Sedesol en Veracruz, Anilú Ingram
Vallines se encuentra preparando la salida de su oficina más o menos en los
primeros días del 2018. ¿La razón? La aun funcionaria estará buscando de manera
formal la candidatura al Senado de la República por su partido el
Revolucionario Institucional.
Ingram
Vallines ya está alistando todo para entregar Sedesol Veracruz, una dependencia
que ha sido ejemplo de trabajo y transparencia, ya que desde que esta dama
llegó como su titular, se han cumplido todos los objetivos sobre todo en el
combate a la pobreza y la marginación.
@IvanKalderon