Desde el Café
Bernardo Gutiérrez Parra
Con el espaldarazo que el dirigente nacional del
Transporte Multimodal, Carlos Sosa Madrazo, dio en Boca del Río al alcalde
xalapeño, Américo Zúñiga Martínez, se despeja la incógnita (si es que había
alguna) sobre quien será el próximo líder del PRI en Veracruz.
Al referirse al munícipe de Xalapa, Sosa Madrazo dijo:
“Américo es la persona que puede ser el enlace entre el PRI de experiencia con el
PRI joven y con el PRI intermedio, donde estamos los que hemos sido desplazados
a lo largo de los años por pseudopriistas o por personas que han visto sólo por
sus intereses personales y no por servir a la gente”.
Además, con la llegada de Zúñiga Martínez al liderazgo
estatal del PRI se terminará de despejar la incógnita (si es que también la
había) sobre el futuro candidato del tricolor a la gubernatura, que será el
senador José Yunes Zorrilla.
Se comenta que probablemente este viernes Yunes
Zorrilla pedirá licencia al senado para ir en busca de la candidatura de su
partido. ¿Américo también pedirá licencia?
Es muy probable que sí, y que también lo haga este
viernes tomando en cuenta dos cosas: que este día hay sesión de Cabildo y que
prácticamente ya entregó las obras que tenía pendientes. Además, le faltan sólo
quince días para entregar la presidencia municipal.
¿Cómo ven los tricolores esta nominación? “Muy
positiva. La verdad es que nos falta alguien que venga con nuevas ideas y que
le dé al partido el impulso que necesita para salir del hoyo. Y Américo llena
esos requisitos con creces”, me dijo un connotado priista.
Sin duda, el primer gran reto que deberá enfrentar el
aún alcalde de Xalapa como dirigente estatal, será sentarse a platicar con
todos los sectores del tricolor para restañar heridas.
El PRI comenzó a cuartearse el último año del
malhadado gobierno de Javier Duarte y terminó hecho pedazos tras la elección a
gobernador en junio del 2016.
Después de más de ochenta años de ser uno de los
bastiones más sólidos del priismo nacional, el partido dejó la gubernatura en
manos de la oposición.
Pero ahí no terminaron sus desgracias, en las elecciones
para alcaldes de este año, el efecto Duarte jugó un papel preponderante y el
tricolor perdió por patiza al obtener apenas 40 de las 212 presidencias
municipales en juego.
Y en esta derrota se le fueron ciudades importantes
como Tuxpan, Poza Rica, Minatitlán, Coatzacoalcos y Xalapa.
Esto aumentó la frustración y enojo de los priistas de
la base que se han sentido relegados en los últimos años.
A Américo le tocará restañar heridas y dialogar con
los resentidos.
Mucho cuidado deberá de tener con los priistas de
viejo cuño; tramposos, mañosos y añorantes de tiempos pasados. Mucho cuidado
con aquellos que en las elecciones anteriores apoyaron a la oposición (donde no
les dieron nada) y se aprestan a regresar al PRI como si nada hubiera pasado.
Américo es un hombre que sabe conciliar y sin duda esa
es una de sus fortalezas. Pero sabe o al menos intuye, que deberá usar mano
dura y firme con los traidores si desea que el PRI regrese al poder de Veracruz
en el 2018.
Sesión
y comida
Este viernes y sábado la Escuela Estatal de Cuadros
del PRI llevará a cabo su Segunda Sesión Presencial Xalapa, Veracruz, en un
conocido hotel de esta ciudad. En esta sesión se abordarán temas de interés
principalmente para los jóvenes.
El encargado de organizar este encuentro es Enrique
Mendoza, el joven y talentoso presidente del Instituto de Formación Política
“Jesús Reyes Heroles”, quien comentó que este viernes tendrán como invitado en
su comida al alcalde de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez.