ADELANTE
por Pepe Valencia
Una vez más se confirma que la solidaridad de la sociedad rebasa a un gobierno incapaz de reaccionar y responder con eficiencia y eficacia ante una tragedia, como es el caso de miles de familias damnificadas por las lluvias en gran parte del estado y en otras entidades de la república.
El apoyo oficial no solo no llega a tiempo, sino que se le ponen trabas a la gente que desea ayudar a los afectados.
Es tal la magnitud del número de pérdidas humanas y bienes materiales que veracruzanos y mexicanos en general que viven en el extranjero, como Estados Unidos, Canadá y España, nos preguntan cómo y adónde pueden enviar donativos en efectivo o en especie a nuestros paisanos en desgracia.
Nos han dicho que no confían en el gobierno y prefieren mandar la ayuda directamente por canales no oficiales.
Esto es lo peor que puede sucederle a un gobierno: la pérdida de credibilidad.
Tal vez este sea el desastre natural más grande en lo que va de este siglo en Veracruz.
Con FONDEN o sin FONDEN necesitan ayuda urgente.
No basta con que la presidenta o la gobernadora se tomen la foto en la zona de desastre. Urge apoyo de verdad.