Perfilando
Por Iván Calderón
Vaya que en política nada es casual, y el
“descubrimiento” de una conjeturada minirefinería clandestina en Veracruz vino
a ser un distractor montado con urgencia para tapar el verdadero escándalo
nacional que estalló con fuerza en Tabasco, donde las redes del crimen
organizado alcanzan ya las estructuras más altas del poder público.
Y es que mientras se intenta sembrar la narrativa de
que en Veracruz hay un repunte del huachicol (incluso reviviendo los dichos sin
sustento del general Eduardo León Trauwitz, prófugo de la justicia y procesado
por encubrir precisamente ese delito desde las entrañas de Pemex), en Tabasco
hay órdenes de aprehensión activas contra el exsecretario de Seguridad Pública,
Hernán Bermúdez Requena, y contra otros altos mandos como Ulises Pinto y Prada,
todos señalados por sus vínculos directos con el grupo criminal “La Barredora”.
Las declaraciones del General Miguel Ángel López
Martínez no dejan lugar a dudas: la complicidad entre criminales y funcionarios
fue institucional, y la pista conduce a un nombre que cada vez huele más a
podredumbre: Adán Augusto López Hernández.
Sí, el mismo que fue gobernador de Tabasco y que hoy,
cobijado por el fuero como senador, opera políticamente contra Veracruz. El
mismo que, junto con un viejo bloque de opositores locales, incluidos Manuel
Huerta y los Yunes, ha lanzado una campaña de desprestigio contra la
gobernadora Rocío Nahle García, intentando vincularla con hechos de 2018 que ni
le corresponden, ni se sostienen con evidencia alguna.
Pero Nahle no se ha quedado callada. En entrevista, la
mandataria fue precisa al señalar que sí se reunió en 2018 con Trauwitz como
parte del proceso de transición, pero fue un encuentro sin consecuencias, sin
acuerdos y sin información relevante. Nada que esconder y nada que temer.
Al contrario: fue su equipo quien detectó el
“huachicol fiscal” derivado de los más de mil permisos ilegales otorgados tras
la reforma energética de Peña Nieto. Más de mil permisos fueron cancelados, y
al final del sexenio de López Obrador solo 37 quedaron vigentes. Y aun así, un
juez —presionado desde las sombras, devolvió un permiso a la empresa Ignamaro,
ligada al exgobernador Ernesto Ruffo. Ese es el verdadero lodazal, no los
montajes mediáticos.
Se tiene que decir: en Veracruz se está limpiando la
casa (en todos los sentidos), mientras en Tabasco se sigue barriendo la basura
debajo de la alfombra, con el agravante de que allá el crimen ya tocó el timbre
de la Secretaría de Seguridad Pública.
Indudablemente a Rocío Nahle le quieren cobrar caro su
verticalidad, su liderazgo en el sector energético y su creciente peso dentro
del movimiento de la Cuarta Transformación a nivel nacional. La quieren frenar
con lodo porque no pueden con argumentos. La quieren ensuciar porque no la
pueden someter.
Veracruz no es territorio de sumisos, ni mucho menos
propiedad de Adán, Huerta o los Yunes. Nahle es una jugadora que aprendió a
mover las piezas, y por su peso político nacional y por su cercanía con la
presidenta Claudia Sheinbaum, seguramente vendrán más embates. Pero ella sigue
firme, consolidando la 4T en uno de los estados clave para Morena a nivel
nacional.
Ahí está el detalle.
@IvanKalderon