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martes, 28 de abril de 2015

Guillermo Zúñiga, un ser humano entrañable: Alfredo Ferrari

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* Su partida nos entristece, pero su legado queda vigente entre nosotros, quienes lo conocimos y compartimos con él ese sentimiento de amor por Veracruz y por México, expresa.

Xalapa, Ver., 27 de abril de 2015.- Al rendirle un homenaje a nombre de la clase política y la militancia del Partido Revolucionario Institucional, el dirigente estatal Alfredo Ferrari Saavedra aseguró que Guillermo Héctor Zúñiga Martínez fue maestro de muchos, amigo de todos, un ser humano entrañable.

En el auditorio Jesús Reyes Heroles, en donde se congregaron distinguidos militantes y cuadros políticos, el líder priísta dijo que la partida del maestro Guillermo Zúñiga Martínez “nos entristece, pero su legado queda vigente entre nosotros, quienes lo conocimos y compartimos con él ese sentimiento de amor por Veracruz y por México”.

En presencia de la señora Guillermina Martínez, esposa del homenajeado y al saludar a sus hijos Américo, Anilú y Guillermo, Ferrari Saavedra dijo que hablar del ex dirigente del PRI, es hablar del maestro por convicción, maestro de toda la vida, además de abogado, servidor público ejemplar y destacado político, actividad a la que se dedicó con pasión.

“Fue un hombre de profundas convicciones, y una de las que defendió con mayor fervor fue su convicción priísta. Congruencia, honestidad y una política de puertas abiertas, fueron el sello característico de su dirigencia”, indicó.

Dijo que durante su periodo como presidente del CDE del PRI, “nos enseñó a ver la política como un arte, como un proceso transformador, para cuyo ejercicio creía firmemente en la profesionalización”.

Profesor forjado en la corriente liberal de los grandes pedagogos de su época, decía que teníamos que formar, capacitar, y profesionalizar a nuestros cuadros políticos. “Por ello se avocó a la formación de 76 Escuelas de Cuadros a lo largo y ancho del Estado, desde Pánuco hasta Las Choapas”.

Señaló que Guillermo Héctor Zúñiga Martínez fue un demócrata convencido que creía que las decisiones debían ser tomadas por las bases, por la militancia. “Por ello, siendo presidente del PRI convocó a la renovación de todos los comités Seccionales a través de Asambleas deliberativas, abriendo así la participación política desde el nivel básico de nuestro instituto político”.

Ferrari Saavedra concluyó su participación comentando que el maestro Zúñiga deja una huella imposible de borrar, no sólo en Veracruz sino en todo México. “Rindamos homenaje a un hombre que fue luz y ejemplo de muchos. Luz para compartir sus conocimientos, con la bondad siempre hacia el alumno, al amigo, al compañero, que nos acercábamos a él con el ánimo de aprender”.

Guillermo Zúñiga, hombre excepcional e imprescindible: Pepe Yunes

* Nunca nada en la vida le fue fácil, pero tampoco nunca nada en la vida le pareció imposible

Guillermo Héctor Zúñiga Martínez fue un hombre excepcional e imprescindible, de esa clase de hombres de temperamentos indómitos que jamás claudican, que nunca renuncian, que nunca abandonan y que siempre lo intentan, aseguró el Senador José Francisco Yunes Zorrilla en el homenaje luctuoso que le rindió la dirigencia estatal del PRI.

Ante la esposa del homenajeado, la señora Guillermina Martínez y de sus hijos Américo Zúñiga Martínez y Anilú Zúñiga Martínez, el Senador dijo que no obstante el sitio que le dio su condición política y social, nunca dejó de ser pueblo y así lo demostró, ayudando siempre a quienes más lo necesitaban.

“Fue un hombre de mente clara, brillante, llamado a trascender dolor y muerte, a superar tiempo y olvido”, destacó en el auditorio Jesús Reyes Heroles, repleto de la militancia política del tricolor.

“Fue un hombre fuera de lo común, de esos que son pocos entre muchos,

porque siempre están dispuestos a brindarse para hacer que las cosas marchen bien; porque su quehacer adelanta épocas, porque saben prodigarse por los demás y porque sustancialmente forman parte de las mejores causas de su entorno y de su era”.

Fue un apasionado de este instituto político, aseguró, al que vio con profundo respeto y al que entendió como un vehículo de transformación social al servicio de Veracruz; caminó distritos y municipios persiguiendo pareceres, se acercó a las bases y ponderó sus estructuras, valoró la aportación constante de una militancia que se vuelca en el trabajo y que marca diferencias.

El maestro Zúñiga permaneció intacto frente a las seducciones del poder, mantuvo intacta su conducta en la congruencia personal y en la convicción publica, intactos permanecieron sus valores y los principios que lo acompañaron durante las decisiones emprendidas como la figura política que supo ser; “nunca en la vida le fue fácil pero tampoco nunca nada en la vida le pareció imposible”.

Reconoció en la figura del maestro Zúñiga a un hombre sencillo, de arraigo con el barrio que le vio nacer y que a pesar del sitio que le dio su condición política o social nunca dejó de ser pueblo, siempre fue parte íntima de ese pueblo al que sirvió incondicionalmente.

“A nadie sorprendía verlo caminar reflexivo sobre las banqueta de su adorada Xalapa sin séquito ni parafernalias, jovial y dispuesto, a nadie sorprendía verlo en la cafetería de la esquina, en la librería de Enríquez y en los espacios públicos”.

Estuvieron presentes el Senador José Francisco Yunes Zorrilla, el diputado Juan Nicolás Callejas Arroyo, los Secretarios Ramón Ferrari Pardiño y Tomás Ruiz González; el Subsecretario Marlon Ramírez Marín y distinguidos priístas veracruzanos.