Desde el Café
Bernardo Gutiérrez Parra

Desde hace lustros este sujeto ha sido acusado de
diversos delitos que van del fraude a la extorsión, pasando por enriquecimiento
ilícito, tráfico de influencias y hasta delincuencia organizada. Y ahí sigue…
A pesar de tantos años como legislador, casi nunca ha
subido a la tribuna. Y basta asomarse a la página del Congreso para darnos
cuenta que jamás ha propuesto una iniciativa que ayude a mejorar las
condiciones de vida de los mexicanos. Su único propósito es calentar una curul
para evadir la Ley.
Romero Deschamps fue muy útil al PRI cuando el voto corporativo
estaba en su apogeo; ahora ya no. Pero en el tricolor nunca olvidan los favores
por lo que es casi seguro que sea otra vez diputado. En caso contrario, se irá
a su casa sin miedo a que la justicia lo llame a cuentas ya que por su edad (75
años cumplidos), difícilmente pisará la cárcel.
Y como él, aunque en menor escala de poder, hay
decenas de diputados bandidos en los congresos locales y federal.
Hace unas semanas el Gobernador Miguel Ángel Yunes
Linares mandó al Congreso del Estado una propuesta para quitar el fuero al
propio gobernador, diputados locales, alcaldes y magistrados.
Pero esta propuesta tuvo en Eva Cadena a su más férrea
antagonista.
La ex recaudadora de Andrés Manuel López Obrador y
actual diputada independiente, argumentó que la medida acallaría las voces de
los diputados y atentaría contra la libertad de expresión.
Esto es falso.
Ni serviría de mordaza contra nadie ni atentaría contra
la libertad de palabra.
Esta propuesta hubiera servido para que presuntos
bandidos como el diputado Vicente Benítez y la propia señora Cadena, evitasen
pitorrearse de la justicia amparados en el fuero y la enfrentaran como lo hace
cualquier hijo de vecino.
El problema con este tipo de iniciativas, es que por
Ley tienen que dilucidarse entre los propios legisladores y ningún bandido
cometerá la torpeza de echarse la soga al cuello para ahorcarse.
Si se hicieran mediante un referéndum otro gallo estaría
cantando.
Si le preguntas, lector, a diez, veinte o cien
ciudadanos si desean que se quite el fuero a los legisladores, la inmensa
mayoría te contestará de manera afirmativa.
Pero si como contraparte esa pregunta la haces a diputados
como Tarek Abdalá, Alberto Silva, Adolfo Mota y Edgar Spinoso, sospechosos de
fraudes millonarios, abogarán porque el fuero sea a perpetuidad.
La diferencia entre la ciudadanía que quiere que se
acaben los privilegios y los legisladores que no quieren soltarlos es abismal.
Como era de esperarse, la propuesta de Yunes Linares
no prosperó, como tampoco hubiera prosperado si el Papa en persona la hubiese
enviado al Congreso local.
La propuesta que modificaría la Constitución estatal
para quitar dicha garantía, recibió 28 votos a favor, 2 en contra y 11
abstenciones. Es decir, ganó la minoría. Y es que la Ley estipula que para
validar ese dictamen debieron apoyarlo dos terceras partes de los diputados
presentes, pero no fue así.
Por años hemos escuchado que los mexicanos positivos,
trabajadores, emprendedores, decentes, honrados y buenos somos más, mucho más,
que los delincuentes y bandidos. Y eso es una gran verdad. Pero también lo es
el hecho que éstos, que son minoría, son los que ganan las batallas
importantes.
Un ejemplo de lo anterior fue la votación de este
miércoles en el Congreso, en que ganaron los bandidos y corruptos. Y por lo
tanto, seguirán gozando del fuero que les permite carcajearse de la Ley.