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domingo, 14 de diciembre de 2025

Desconfianza en inversionistas

 


IMPRONTA

Carlos Miguel Acosta Bravo*

La reunión del 3 de diciembre de 2025 en Palacio Nacional entre la presidenta Claudia Sheinbaum y empresarios encabezados por Carlos Slim (Grupo Carso), Francisco Cervantes (CCE) y otros del Consejo Mexicano de Negocios (CMN) se centró en reactivar la inversión privada ante el estancamiento económico (0.3% crecimiento proyectado 2025), alineando al sector privado con el Plan México para innovación, infraestructura y nearshoring.

Los empresarios expusieron preocupaciones por la baja inversión privada (0.3% 2025, 1.1% 2026 de Banxico), ante la incertidumbre jurídica (generada por la reforma judicial, y litigios fiscales como FEMSA), estabilidad macroeconómica, cadenas de suministro globales y oportunidades en manufactura/energía, solicitando mayor certeza para co-invertir con el Estado mexicano.

El compromiso de magnates, entre ellos Carlos Slim, son de  de invertir 40,000 millones de dólares (2.1% PIB), potencialmente impulsando un crecimiento mayor al 1.5% vía infraestructura, soberanía productiva y alrededor de 100 mil empleos. Se logró la creación del Consejo Nacional para la Promoción de Inversiones, con reuniones periódicas para detonar proyectos del Plan México, con un portafolio mayor a 290 mil millones USD.

Se comprometió también la Ley de Inversiones en Infraestructura para el Bienestar (la cual se presentará para aprobación Congreso antes 15 diciembre), misma que tendrá  ventanilla única digital  antes del 21 abril 2026, misma que contendrá la  licitación 15 polos de bienestar.

La presidenta Claudia Sheinbaum destacó "perspectivas coincidentes" con estabilidad y dinamismo industrial, pero analistas dudan cumplimiento (detalles/ por el cumplimiento en tiempo pendientes), aunque se fortalece el diálogo entre gobierno-empresas en contexto de nearshoring.

El crecimiento económico de México se ha paralizado en 2025, con proyecciones de 0.2-0.4% (consenso financiero/internacionales), debido a la falta de inversión privada por desconfianza empresarial, agravada por reformas institucionales y riesgos externos como TMEC.​​

Existe una creciente incertidumbre por la Reforma al poder  Judicial. La elección popular de jueces ("tómbola") y contrarreforma al amparo ha erosionado la independencia judicial, pausando la Inversión Extranjera Directa, misma que registró una  caída del 9% post-reforma, al generar dudas sobre resolución imparcial de disputas laborales/contratos. Los empresarios evalúan perfiles judiciales antes de invertir en temas como semiconductores/aeroespacial, priorizando el estado de derecho.​​

El caso FEMSA-SAT y que ha sido interpretado como una violación cosa juzgada y el atraer casos la Fiscalía General de la República, como el de la activista del Movimiento Contra la Corrupción y la impunidad María Amparo Casar y el del exgobernador de Chihuahua César Duarte, son claras referencias de como la tanto la FGR como la SCJN, están  reabriendo casos ya juzgados. El crédito fiscal de FEMSA (2,868 MDP, rechazado en una votación de 8 a 1 en noviembre 2025), pese a cosa juzgada, han sido interpretados como intervención política que socava certeza jurídica y genera desconfianza, alertando a inversionistas sobre riesgos retroactivos. Esto amplifica percepción de decisiones para complacer al régimen de Morena, profundizando desconfianza entre los empresarios.

Si a eso sumamos la creciente inseguridad, la sobrecarga fiscal y las presiones por el costo de la deuda por pensiones contributivas y no contributivas (pensiones, que están generando una creciente deuda) y las crecientes tensiones comerciales con el gobierno de Donald Trump completan un complicado escenario geopolítico y económico que están estancamiento, limitando dinamismo pese nearshoring.

Analistas como Banorte recortaron posiciones en FEMSA (2% exposición), alertando recuperación pausada por riesgos fiscales retroactivos, mientras Coparmex y American Chamber denuncian abusos del SAT que erosionan certeza contractual. Esto amplifica crecientes temores en alrededor de 100 litigios fiscales de empresas como Alsea y Herdez), pausando la Inversión Extranjea Directa IED y han anulado la planificación financiera de las empresas ante percepción de judicialización política. Los empresarios priorizan entornos predecibles, frenando inversiones pese nearshoring, con base en los analistas que  proyectan una  volatilidad continua.

En consideración de todo lo anterior es necesario que el gobierno mexicano genere acciones, no solo discursos que devuelvan la confianza que necesitan los empresarios e inversionistas, pues es un binomio fundamental para la estabilidad y el crecimiento económico de México, que permitirá el crecimiento y dará certeza y certidumbre y lo mejor creará empleos en la economía mexicana en un contexto internacional cada vez más incierto y cambiante de manera cotidiana.

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cacostabravo@yahoo.com.mx

 

*Maestro en comunicación por la Universidad Iberoamericana, de la cual formó parte del cuerpo académico de la Licenciatura en comunicación, así como de la Universidad Anáhuac, campús norte de CDMX.