Las noticias de Veracruz en Internet




miércoles, 28 de mayo de 2025

Faustino Arango, un juzgador honesto que merece continuar como magistrado

-Participa en la elección judicial federal con el número 15 y el color lila

-“Toda mi vida la he dedicado a la judicatura y me costó mucho llegar”

-“Para sentenciar se necesita preparación, experiencia y capacitación”

Por Sergio González Levet



Platico con José Faustino Arango Escámez, un joven magistrado que añade una vasta experiencia en los juzgados y participa en la elección judicial para continuar como Magistrado del Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Séptimo Circuito, con sede en Xalapa.

Obvio, la primera pregunta tiene que ser sobre los motivos que lo orillaron a participar en la elección:

“Decidí participar en la elección judicial porque toda mi vida la he dedicado a la judicatura. Llevo la mitad de mi vida biológica en los tribunales. Me costó mucho ir ascendiendo desde abajo hasta ser magistrado federal, con diversos exámenes y concursos de oposición.

“Ahora, para el método de selección, que ahora es otro, pues hay que intentar permanecer bajo esa dinámica. Yo como abogado no me veo en otra área que no sea la judicatura. Tengo ya mucha experiencia como juzgador y creo que tengo mucho que aportar a la judicatura federal y a la ciudadanía en general con el servicio público de impartición de justicia”.

Una duda que tenemos muchos es si cualquiera podrá ser juzgador, aunque no tenga el conocimiento necesario…

“Hacer una sentencia puede ser no tan complejo”, me contesta, pero solamente “si se tiene la preparación, la experiencia, la capacitación técnica y jurídica para hacerlo.

“Sin embargo, aun teniéndola hay casos mucho más relevantes o complejos en su resolución, en el discernimiento de los temas jurídicos, de los derechos humanos en conflicto. Hay muchos temas en el Derecho que el quehacer jurisdiccional dilucida, y en esa medida pues sí puede ser complejo si no se tiene la preparación y realmente los estudios necesarios para elaborar sentencias que puedan resolver de la mejor manera los casos concretos”.

A sus 47 años de edad, don Faustino es maestro y doctor en Derecho, y completa un cuarto de siglo de servicio profesional en los juzgados. Yo no me quiero quedar con la duda y le pregunto si realmente cree que la gente va a votar por él. No tiene que pensar mucho su respuesta y me responde con decisión:

“La ciudadanía se ha informado de la elección judicial, ha investigado los perfiles de cada uno de los que estamos en funciones, como es mi caso en la magistratura federal, ya en funciones de muchos años con una carrera judicial sólida como la que tengo ya 16 años de juzgador y 24 años de servicio. Bajo ese escenario, la gente que acude a las páginas del INE donde está mi trayectoria puede ver que tengo un expediente limpio en el servicio público, jamás con irregularidades ni ninguna responsabilidad administrativa. Los que me conocen en la zona del Estado de Veracruz cuando fui juez federal durante siete años y ahora magistrado federal también adscrito al estado saben quién soy bajo ese escenario. Mi currículum y mi trayectoria, mi expediente limpio, mi forma de juzgar, mi productividad en los asuntos en los juzgados que he tenido a cargo, y el tipo y calidad de sentencias que he emitido pues serían suficientes para que consideraran darme el voto”.

Comparto con este joven y experimentado juzgador la preocupación de muchos ciudadanos por el enorme rezago que hay en los juzgados de México. Su respuesta no puede ser menos que informada:

“En las cortes del mundo en general hay rezagos porque es difícil solventar los asuntos. No es posible que se saquen en bloque o en masa o en producción masiva, sino que cada uno requiere un estudio, una reflexión, un análisis jurídico muy sólido, y mucho más tiempo que la recepción de demandas de justicia.

“No obstante, la corte mexicana es de las que menos rezagos tiene en el mundo. Ahora, hablando de juzgados y tribunales federales, yo diría que el rezago ha sido también derivado de falta de creación de nuevos órganos jurisdiccionales. Hay en México 10 o12 órganos o juzgados o tribunales por cada cien mil habitantes, cuando en otros países, incluso de Latinoamérica, hay entre 17 y 21 juzgadores por cada cien mil habitantes.

“Añada usted que la pandemia no ayudó, el paro laboral tampoco ayudó.  Y no se va a solucionar por cambiar los perfiles o cambiar os jueces o magistrados con el sistema de elección ciudadana. Más bien lo que se requiere son funcionarios comprometidos. Cuando fui juzgador por siete años, y ahora como magistrado federal nunca he tenido rezagos. Sí se puede lograr, pero hay que dedicarle más horas de las que trabajamos normalmente. Hay tribunales que por más asuntos que quieran sacar, reciben doble o triple de asuntos a la semana, y entonces no es posible sacarlos. Hace falta crear más órganos, ése sería un tema relevante”.

Culmino la interesante charla con la pregunta de qué hará cuando sea elegido y regrese a su puesto.

“No necesitaría hacer nada porque ya estoy en el cargo, ya estoy en funciones de magistrado federal. Accedí desde abajo, empecé costurando expedientes hasta llegar a los exámenes de oposición para actuario, secretario, estudié cuenta, juez federal y magistrado federal. Hice muchas cosas en mi trayectoria para llegar a ser juzgador federal.

“En cuanto a la permanencia, pues sí se necesitaría lograr que la ciudadanía investigue y se informe, vea mi solidez, mi trayectoria, mi expediente limpio, para que entonces podamos permanecer un tiempo más, dado que mi edad de 47 años pues no me permite una jubilación decorosa, y creo que todavía puedo estar en la judicatura varios años más”.

Y para que este experimentado juzgador pueda seguir aportando, hay que ir a votar por Faustino Arango, en la boleta lila y con el número 15.