El primer gran descalabro político del presidente Andrés Manuel López Obrador en este mes fue el de la consulta popular para enjuiciar a sus antecesores. No despertó interés en la mayoría de los mexicanos y apenas unos cuantos acudieron a votar por el “Sí” a pesar de la campaña emprendida desde palacio nacional exhortando a los ciudadanos a participar.
Todos deseamos
justicia y cárcel para los saqueadores de la nación, sean de regímenes
anteriores o del actual gobierno. Sin embargo, consideramos innecesaria la
consulta para vincularlos a proceso. Basta la voluntad política. Someter el
tema a votación fue un colosal y muy costoso capricho… o una prosaica tomadura
de pelo.
El segundo fracaso
en menos de una semana ha sido la
decisión del ministro Arturo Zaldívar de no aceptar la prórroga de dos años a
su período como presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Se
negó, no obstante las presiones e insistencia presidenciales.
Esta intentona
parecía más bien un ensayo táctico o el primer paso para más adelante modificar
de nuevo la Constitución y ampliar el mandato de AMLO o, ¿por qué no?, permitir
su eventual reelección.
Si logra mayoría en
el Congreso, consolida el respaldo de las fuerzas armadas y continúa el reparto
de miles de millones de pesos a adultos mayores y jóvenes, nada podría
detenerlo en su camino a la dictadura… aunque por otro lado aumenten la pobreza
y los muertos por la pandemia y la inseguridad.
La tercera gran
derrota apenas viene. Acaso en el ínterin de aquí al final de este mes pierda o
gane otras pequeñas batallas.
Por instrucción
presidencial el 30 de agosto todos los estudiantes retornarán a las escuelas
para recibir clases presenciales, “llueva, truene o relampaguee”.
¿Cuántos padres de
familia acatarán esta disposición si los contagios de Covid van otra vez al alza?
¿Quiénes van a exponer a sus hijos a contraer el letal virus?
Claro, después matizó,
quienes no quieran, pues no manden a sus hijos a la escuela.
Y, júrenlo ustedes,
así será, muy pocos obedecerán al presidente López Obrador.
Las escuelas estarán
semivacías el lunes 30 de agosto. Un revés más al presidente en solo un mes.
Se aproxima la gélida
cuenta regresiva sexenal. Políticos y no políticos dirigen ya la mirada hacia
los presidenciables recién destapados por el propio AMLO y se aprestan a darle
la espalda al solitario inquilino de palacio.