Redacción Políticos
ALMA GRANDE
Por Ángel Álvaro Peña
Como sucede en la mafia más cruel, quien no está de acuerdo con el concepto que tiene la gente sobre sus capos, los amenaza. Así, se conduce el presidente municipal de Poza Rica, Fernando Remes, ex beisbolista y actualmente dedicado a ser cómplice de todo tipo de delitos, a grado tal que su territorio es una plaza de la que se dice propietario.
Al estilo pandillero de la venganza y la advertencia. El alcalde mejor pagado del país, autodenominado amigo del Presidente de la República, ha demostrado que no le gustan las críticas y mucho menos ser exhibido con la verdad sobre sus actividades ilícitas y sus traiciones políticas.
La deslealtad es una expresión más sucia del individualismo donde nada ni nadie importa sólo salvarse a sí mismo. Y esta actitud no puede ser propia de los políticos que deben pensar en la comunidad más que en sí mismos; sin embargo, cuando se improvisa a funcionaros públicos y se les habilita como representantes del pueblo sin serlo, se vuelven proclives a desvirtuar una actividad que debe ser transparente, para convertirla en un fraude.
Este es el camino que tomó Fernando Remes, quien llegó a la fama como beisbolista profesional, para luego llegar al norte del estado de Veracruz, con el propietario del equipo Tigres de México, don Alejo Peralta, a quien en el proceso de “adaptación” a su vida de robos y delitos, le quitó un rancho.
A partir de estas acciones el actual presidente municipal de Poza Rica no ha dejado de estar fuera de la ley y, también de la lealtad. Como se comentó anteriormente ante el peligro de que pueda ocupar otras personas el cargo que dejará este año en la presidencia municipal, prefiere negociar con el contrincante partidista para garantizar su impunidad, es decir que sus delitos queden sin castigo.
Ante esta necesidad aprovechó un desayuno de la oposición para establecer contacto con Pepe Yunes, candidato a la gubernatura del estado por la alianza opositora, y ofrecerle todo el apoyo del ayuntamiento, a cambio de no ser castigado por sus propios compañeros de partido, con quienes mantiene una pésima relación.
Ahí no le importó su supuesta relación con “su amigo” el Presidente de la República, ni la oportunidad que le brindó el partido para llegar al cargo que ostenta. Simplemente quiere salvar el pellejo, como los vulgares ladrones que huyen de la justicia a costa de traiciones y engaños.
Denunciar éstos y otros delitos del alcalde de Poza Rica, que no tienen fin ni límites, implica correr peligro, porque una vez que se ventilan sus actividades secretas, amenaza, envía a esbirros a hablar por teléfono desde números de estados lejanos, para amedrentar y callar a los comunicadores que, en este caso particular, denunciamos sus excesos y su engaño al Presidente, al partido, a los pozaricenses y al pueblo de México.
El desgaste que implica este tipo de traiciones y jugarretas ilícitas, para el partido que se exhibe como un nido de ratas gracias a la conducta delictiva de Remes, a Poza Rica, donde la gente es honesta y a los veracruzanos que son leales y decentes. Nada importa a la hora de evitar la cárcel.
En los medios que denunciamos las anomalías que comete Remes hay evidencias, pruebas, grabaciones, video de lo que señalamos. Ese es el gran temor del ex beisbolista que bien puede terminar en la cárcel si hay justicia en Veracruz.
Así, por una denuncia en los medios el mensaje es claro al respecto: “Sr. Ángel, cuídese mucho porque está pisando muy fuerte el pie a Remes. Y no le vayan a poner una trampa”.
Cuando las recomendaciones a los comunicadores son anónimas cobran la categoría de amenaza. Pero no se trata de un mensaje aislado, la aparición de denuncias en los medios provoca que se multipliquen las intimidaciones, y lleguen, ya sea por whatsapp, correo electrónico, llamadas al celular, a la oficina, y a veces hasta en el domicilio de los comunicadores, quienes nos sentimos intimidados ante tal abuso de poder de personas como Fernando Remes Garza, quien utiliza el poder para enriquecerse y afectar a la población.
Mensajes como “Saludos, recuerde que en política los amigos son de mentiras los enemigos son de verdad”.
La práctica ilegítima de la función pública muchas veces no es denunciada por temor a represalias que no se sabe hasta dónde pueden llegar. Aseguran los empleados del ayuntamiento que lo de menos es perder el trabajo, temen por sus vidas y las de sus familiares.
El conocido y varias veces castigado comportamiento del presidente municipal contra las mujeres ha creado un clima de terror en los empleados, quienes, en lugar de tenerle respeto le temen. Ya en una ocasión debió solicitar disculpas públicas a una de sus subordinadas por haberle tocado la pierna, y no es el único acoso en sus malas costumbres, es déspota con los integrantes del pueblo que gobierna porque ha llegado al extremo de mentarle la madre a mujeres en la fila para votar, es prepotente y poco empático con la población.
De todo esto hay pruebas en video, que son testimonios de una conducta que alguien debe castigar porque no podemos esperar a que lleguen nuevas autoridades a Poza Rica para conocer con precisión el nivel de delitos que perpetró al interior del ayuntamiento, porque para cuando tengan las pruebas suficientes en la mano, El Pulpo ya huyó con todo lo robado, alcanzando la impunidad.
La gravedad del asunto radica en las amenazas contra quienes conformamos los medios de información que pueden estar disfrazadas de accidentes y nadie sería responsable. Por lo pronto la amenaza está dada y el temor se infundió en toda la población de Poza Rica, que ya le cuentan los días para no tenerlo como el jefe de plaza de la delincuencia en la localidad.
PEGA Y CORRE.- La primera discusión parlamentaria que tendrá Morena en el próximo Congreso será la de quitarle el fuero a todos los legisladores plurinominales del Congreso Federal y de los Congresos Locales. A temblar…Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes.
