Sin tacto
Por Sergio González Levet
Encuestado 1: “¿Que quería que contestara a los tipos que llegaron a la puerta a preguntar por quién iba yo a votar para Presidenta? Pues les dije que por Claudia Sheinbaum. Tengo tres hijos que trabajan en el Bienestar y me tienen bien detectado que recibo mi pensión de adulto mayor. Ni modo que les dijera la verdad y nos dejaran sin los apoyos. Si iban hasta con chalecos guindas. Pero el año que entra me voy a desquitar en las urnas, porque el voto es secreto”.
Encuestada 2: “Yo soy enfermera y laboro desde hace más de 20 años en el hospital. Cuando me llamaron por teléfono y me dijeron que era una encuesta confidencial, supe lo que tenía que hacer. Les dije que le iba a López Obrador, que siempre he asistido a los mítines. Lo que no les conté es que ya me tienen hasta la… coronilla porque me obligan a asistir a esos eventos en días libres, y además tengo que pagar el autobús y llevar mi lonche. De tonta les digo. Yo voy a votar en contra de ellos, porque veo cómo tienen a la gente sin medicina y cómo les quitaron los servicios médicos. Yo sobreviví de milagro al coronavirus porque nos obligaron a trabajar durante la pandemia y ni cubre bocas nos daban. Por mí ya que se vayan, pero si me preguntan les digo que estoy con ellos y con su candidata. No vaya a ser la de malas, ya ve cómo son”.
Encuestado 3: “Dos hijos cobran las becas de los jóvenes; la mayorcita, la que es madre soltera, tiene su apoyo también, y luego los dos más chicos van a la primaria y recibimos su beca. Y yo, como soy discapacitado pues también tengo una ayuda. Así que en la casa sacamos para vivir decorosamente con el puro Bienestar. Por eso les dimos nuestros nombres para que los pusieran en la encuesta a favor de Claudia. Pero acá en corto le digo que vamos a votar en contra. Mire, doña Chole la vecina nos ha estado platicando de Xóchitl, de cómo empezó desde abajo y conoce a los pobres. Y la verdad yo le creo, pero no le vaya a decir a nadie que vamos a otra en contra, por favorcito”.
El encuestador: “Nos pidieron que hiciéramos una encuesta sobre la intención de voto para la Presidencia de la República. Desde que tienen un asesor español nos han estado exigiendo que hagamos muy bien la trampa. Tenemos que poner la metodología de la encuesta. La respuesta que ellos quieren la consiguen porque nos dan los teléfonos a los que debemos llamar y las direcciones de las casas en donde vamos a tocar. Son de empleados de Gobierno, de profesores sindicalizados, de beneficiarios de programas de Bienestar. Así que las cifras en favor de Claudia Sheinbaum nos salen altísimas y las de Xóchitl Gálvez muy por abajo. En lo único que le metimos mano fue a los números de Samuel García, porque nadie lo conoce, y tenía que aparecer con un porcentaje en su favor. Sin embargo, las encuestas verdaderas nos dicen que se avecina una catástrofe para AMLO y sus candidatos. Es que han exagerado con sus robos y su soberbia”.
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