Xalapa, Ver.- El encuentro de dos grandes de la historia de la música veracruzana, Agustín Lara y Antonia del Carmen Peregrino, más conocida por su nombre artístico de “Toña la Negra”, es narrada al detalle y con un picaresco toque de humor por el gran dramaturgo cordobés Emilio Carballido en el guión de la ópera Tropical, que fue estrenada recientemente por el grupo Katarsis, Música y Danza, en el Teatro del Estado de esta capital.Tropical es el resultado de varios años de investigación artística y, sobre todo, del Estímulo para Creadores con Trayectoria otorgado en 2006 por el Gobierno del Estado de Veracruz, el Instituto Veracruzano de la Cultura y el CONACULTA a Francisco González Christen, quien es autor de la música de esta ópera, cuya escenografía e iluminación fueron diseñadas por Daniel Acevedo.
La realización de la escenografía estuvo a cargo de Jesús Aldama, el vestuario fue creado por Itzelth Nashiellie Gutiérrez, las composiciones dancísticas fueron obra de Angélica Ramírez, así como de Cecilia Díaz de León –asistente de dirección escénica-- y Rafael García, y bailadas por el grupo Katarsis, mientras que la dirección de escena fue responsabilidad de Jorge Castillo, con la magistral presencia del maestro Oscar Tarragó al piano, y la participación de Juan Manuel Lara y Miguel Chablé en las percusiones.
La que ha sido denominada por su autor “primera ópera veracruzana del milenio” narra las vicisitudes que, tras su encuentro con el “Flaco de Oro” cuando se desempeñaba como lavandera, tuvo que sortear “Toña la Negra” para llegar a la ciudad de México y el inicio de su carrera artística de la mano del gran compositor, hasta alcanzar el triunfo en el teatro Politeama, en enero de 1933, interpretando las composiciones del inmortal músico-poeta.
La soprano Rosaura González Ramírez protagoniza Tropical, encarnando a “Toña la Negra”, acompañada por el tenor Enrique Murguía en el papel de Agustín Lara; el “Marido” es interpretado por el tenor Samuel Alamilla, mientras que Eileen Ratchel Martínez González, Teresita Jiménez Cueto, Yeyetcitlalli Chávez Guzmán, Saraí González Arano, Sharon Alexandra Hernández Barrera, Erick Cruz Molina, Andrea Trueba Perdomo, Minnie Portales Cedillo, Marcela Vargas García y Graciela Cedeño interpretan diversos personajes, al estilo de las obras teatrales del siglo XVII.
Los bailarines Ángela Carmona Campos, Nicté Méndez Zamorano, Julia Tapia, Fabiola Elías, Marcel Esbey Toledo Aguilar, Mariana Blanco Díaz, Abraham Ponce, Braulio Escamilla, Dabir Iván Hernández Gutiérrez y Rafael García ejecutan varias coreografías con distintos vestuarios que, según la opinión del público, fueron muy bien logrados, mientras que Carmen Pale participa con una danza afroantillana.
La obra, de un solo acto, está dividida en siete escenas, la primera de las cuales se desarrolla en el barrio de La Huaca, del puerto de Veracruz, a inicios de los años treinta del siglo anterior. Allí, tras una noche de farra en compañía de unos amigos, Agustín Lara escucha cantar muy temprano a Antonia del Carmen Peregrino mientras asea la ropa con otras lavanderas y, atraído por su voz, la invita a visitarlo en la capital mexicana para que tome parte en una revista musical que estrenará próximamente. Incrédula, Antonia no sabe qué hacer, pero sus compañeras de oficio la convencen de que acuda a la cita.
En la segunda escena, Toña llega a su casa y encuentra dormido a su esposo, a quien convence de ir al encuentro de Lara, no sin antes batallar durante un rato contra el rechazo del marido, quien no puede imaginar cómo van a realizar el viaje sin contar con los recursos económicos necesarios.
La tercera y cuarta escenas muestran el momento en que Toña y su marido llegan a la oficina de Agustín Lara, donde se encuentran con numerosas aspirantes a participar en la revista musical, por ser el último día del “casting”. Luego de aguardar durante horas, Toña pasa a probar suerte, sin que Lara la reconozca al principio, hasta que la escucha cantar y recuerda su encuentro en el puerto de Veracruz, contratándola de inmediato.
En la quinta escena aparecen Toña y su esposo, completamente transformados gracias al apoyo económico recibido del maestro Agustín Lara, en la habitación de uno de los más elegantes hoteles de la época, donde ambos se demuestran su amor y dialogan sobre el porvenir.
La sexta escena traslada al espectador hasta el momento preliminar al estreno de la revista musical de Agustín Lara. Músicos y bailarines repasan sus papeles cuando, repentinamente, “Toña la Negra” entra en escena, molesta por la ropa tan ligera que deberá usar en su debut, y le reclama por ello al músico-poeta, quien ante la amenaza de renuncia por parte de su “estrella”, se queda preocupado por el vacío que aquella mujer de hermosa voz dejará en la obra, mientras las coristas se disputan el papel principal.
Finalmente, en la última escena, Toña aparece ataviada a la usanza de la mujer jarocha y el espectáculo anunciado inicia, bajo la batuta del gran Agustín Lara, resultando un gran éxito y culminando con la canción “Noche criolla”, composición del propio músico-poeta, que se convierte en una animada rumba interpretada por todo el elenco.
Al final del estreno de Tropical, el público presente en la sala grande del Teatro del Estado premió con nutridos aplausos tanto al autor como al resto de su equipo de trabajo, que espera poder repetir presentaciones en otros foros estatales y nacionales de esta ópera cuyo montaje exigió tres meses de esforzada labor por parte de todo el elenco.
