Perfilando
Por Iván Calderón
Con el estandarte de la “negritud” el mal
logrado ex secretario de gobierno en la era de Cuitláhuac García desde el
exilio se niega a querer de dejar influir electoralmente en el estado, mandando
a sus “infiltrados” a inscribirse en el proceso interno de MORENA para la
renovación de las 212 alcaldías de la entidad.
Le explico.
Pese a la traición que Eric Cisneros Burgos le
propinó a la gobernadora Rocío Nahle y que muchos de sus aliados participaron
en la campaña negra contra la mandataria, ahora, como lobos vestidos de ovejas
buscan incrustarse ya sea en la nómina estatal o peor aún, en las alcaldías,
cosa que se sabe perfectamente en Palacio de Gobierno.
En su columna, el periodista Ricardo Chua da
cuenta que, en el municipio de Pánuco, Oscar Guzmán de la Paz está empecinado
en dejar a su esposa como candidata a la alcaldía para que así le cubra el
enorme daño patrimonial que ocurre en esta población, el cual ha sido
documentado por el organismo fiscalizador y por los propios ciudadanos.
Sin embargo, desde el norte hasta el sur existe
una serie de ediles y personajes que participaron en el financiamiento a favor
del “Bola 8” y por supuesto en los ataques mediáticos directamente hacia la
jefa de las instituciones jarochas.
En este sentido, destaca el ex alcalde de
Tlacotalpan Cristian Romero personaje proveniente de las filas “Yunistas” y
luego a las órdenes del ex titular de SEGOB, hizo cuanto pudo por denostar a
Nahle.
Por su parte, el presidente municipal de Isla,
Gustavo Alfonso Torres, al igual que en Pánuco, pretende imponer a sus esposas
como candidatas a la alcaldía, cuando la gobernadora tiene muy bien documentado
todos los malos comentarios que lanzaban contra ella, al soñar (en el pasado
reciente) con que Cisneros se convirtiera en “Gobernador”.
“Tavo Mazoco” como le conocen en tierras piñeras
es el nuevo rico de los Llanos del Sotavento y con todo lujo de nepotismo busca
que su cónyuge Yesenia Reyes sea candidata de MORENA, para cubrir así todas sus
fechorías.
Cabe destacar que también en la región de los
Tuxtlas y en la zona de la Cuenca existió un grupo de ediles muy ligados a las
negras redes de Patrocinio y de igual forma pretenden perpetuarse en el poder
con tal de financiar en el futuro al exiliado Cisneros quién juró y perjuró
regresar… porque devolver lo robado jamás.
Este mismo efecto ocurre en la zona de Nogales,
Misantla, Coatepec, Actopan, y por supuesto Lerdo de Tejada, y la región de
Otatitlán donde las alcaldesas ya se imaginaban embajadoras de la “negritud”
movimiento que fue usado políticamente y ahora se encuentra en el olvido.
De todo lo anterior tiene pleno conocimiento la
primer morenista de Veracruz, Rocío Nahle quién ha señalado no meterse en el
proceso interno, pero como mujer de señales ha dado muestra que todo lo
involucrado con Cisneros tiene como destino: el basurero político de la
historia.
Ya se verá.
@IvanKalderon