CLAROSCUROS
PARTE II
José Luis Ortega Vidal
(1)
Mañana se realizará el primero de dos debates entre los candidatos a la gubernatura veracruzana.
Lo deseable es que ganen la democracia y la exposición del diagnóstico que cada aspirante tiene sobre el estado de cosas que guarda la entidad, así como las medidas viables para avanzar en su solución.
En la primera parte de este artículo se puntualiza la existencia de una guerra mediática por encima de las propuestas de uno y otro candidato.
Será muy importante observar cuál de estas variables se impone el sábado 27 de abril en el Museo de Antropología de Xalapa:
a) La continuidad de acusaciones mutuas para añadir fuego a la guerra verbal, documental, mezclada con guerra sucia de un lado y otro
b) La argumentación sólida sobre qué hacer y cómo hacerlo a favor de un Veracruz sumido en grave retraso y crisis de inseguridad, desempleo, infraestructura dañada, salud descuidada
c) Una apuesta por el equilibrio de lo que valga la pena exponer respecto a la corrupción -con pruebas firmes- y el resumen inteligente de un programa de acción institucional sólido y viable.
(2)
En la primera parte, expuse las fallas y errores que aprecio en la campaña de Rocío Nahle García.
Del lado de José Yunes Zorrilla se observa un lastre severo: la presencia de la familia Yunes Linares y Yunes Márquez; esto es, el jefe del clan Miguel Ángel, padre y ex gobernador de Veracruz; así como sus vástagos, particularmente Miguel Ángel, hijo y candidato al Senado de la República.
Entiendo la coyuntura política de Yunes Zorrilla: no haber sumado a los Yunes Linares y Yunes Márquez, lo habría dejado totalmente fuera de la competencia real por la gubernatura.
Y al mismo tiempo, añadirlos a su alianza y equipo le representa un lastre pesado; necesario por estrategia, pero costoso al mismo tiempo.
¿Por qué?
Hay un pasado no sólo polémico, sino oscuro en la trayectoria de Miguel Ángel Yunes Linares.
Estamos frente a un político que militó en el PRI para cambiarse al PAN, ocupó cargos del más alto nivel federal y estatal, sin que ello le haya representado suficientes ingresos para amasar la enorme fortuna económica de que ha gozado y goza.
Ese solo elemento -hay muchos más en el currículum de dicho personaje- alimenta a los defensores de Rocío Nahle y rivales políticos de José “Pepe” Yunes, bajo la falacia -ciertamente eficaz, así remita a una conclusión errónea- de que las acusaciones por enriquecimiento ilícito contra la abanderada de MORENA/PT/PVEM, no se comparan frente el enriquecimiento ilícito de “los Yunes”.
Esta carga la asume Pepe Yunes porque en el imaginario colectivo el golpe queda así: contra un apellido, una familia, un equipo político donde todo lo Yunes se coloca como sinónimo de falsedad y corrupción.
Y resulta importante subrayar que José Yunes Zorrilla no tiene lazos consanguíneos con los Yunes Linares ni los Yunes Márquez…
Tampoco hay parentesco de Pepe Yunes con Héctor Yunes Landa, a quien también le toca recibir la andanada de señalamientos, aunque su carrera y patrimonio no escalan al nivel del escándalo de quien es -aquí sí- su primo hermano: Miguel Ángel, el ex gobernador…
(3)
Nahle García carga sus propios errores: de diciembre al mes de abril la mega ventaja que todo mundo le reconocía se diluyó por fallas atribuibles mayormente a ella.
Pero en sentido estricto -y en un afán de ser objetivos- del lado de Pepe Yunes hay cargas negativas atribuibles a su equipo, que han frenado el avance más allá de un casi, o un empate técnico con su rival…
Massive Caller es una empresa que publica diariamente estudios demoscópicos sobre las campañas presidencial y por las nueve gubernaturas en juego; de 9.2 de ventaja a Rocío Nahle hacer unas semanas, dicha encuestadora colocó a menos de un punto la diferencia entre Nahle y Yunes apenas el miércoles pasado.
(4)
¿Ya rebasó Pepe a Rocío?
No hay datos firmes y suficientes para afirmarlo.
¿Nahle tiene la elección ganada porque -como ella misma declara- está a veinte o treinta puntos de ventaja?
No hay datos firmes y suficientes para afirmarlo.
(5)
A la hora de revisar encuestas nos topamos con resultados extremosos y, por tanto, dudosos.
En lo personal no creo en las encuestas que ubican a Rocío Nahle con más de treinta puntos de ventaja, porque matemáticamente un resultado semejante no ha ocurrido nunca desde que Veracruz entró en la lucha electoral democrática.
Pero tampoco me convencen las encuestas que hablan de Pepe Yunes como “el caballo que ya alcanzó, rebasó y ganará porque ganará”.
(6)
Falta un mes y una semana para las elecciones; faltan dos debates; falta la campaña por las diputaciones locales; faltan avances en las denuncias que tirios han puesto contra troyanos y viceversa en la Fiscalía General de la República; faltan estrategias añejas que uno y otro equipo conocen y tienen capacidad humana, material y financiera para aplicar durante las semanas que corren y el día de la contienda; entre ellas la propaganda de tierra a través de medios tradicionales, la movilización de contingentes para convencer a indecisos, el traslado de votantes el día de los comicios, la vigilancia de urnas y del conteo de votos casilla por casilla; los ejércitos de abogados; la presión sobre los árbitros (OPLE e INE) para que no se inclinen a favor de nadie.
(7)
Queda mucho por hacer y faltan poco más de cuatro valiosas semanas, pues la campaña concluye el 27 de mayo.
Este arroz aún no se ha cocido.
(8)
Van dos ejemplos particulares de errores en ambos equipos.
Rocío Nahle se rodea de gente que no suma, sino resta:
· El alcalde de Martínez de la Torre, Rodrigo Calderón Salas, añadió a la polémica caravana de lujosas camionetas de su equipo proselitista, un vehículo a nombre de…el Ayuntamiento de Martínez de la Torre.
· En el distrito local 27 con cabecera en Acayucan, municipio gobernado por el PRD, se impuso a la candidata del PAN, Grindelia Domínguez Morales, una dama acayuqueña tan respetable como desconocida y desconocedora del escenario político de la zona, a quien “encandilaron y luego dejaron sola”, me explica gente profesional del ámbito partidista y de la lucha electoral.