
**En su primer año de gobierno municipal en 2022 el ORFIS le
detectó irregularidades millonarias.
**Lobeira Rodríguez ni enterada ha de estar de todo ello, ya
que su esposo es el teje maneje administrativo.
Veracruz, Ver. 02 octubre
2023.- Se habla mucho del municipio de Medellín y de otros
ayuntamiento que resultaron observados por el ORFIS en la Cuenta Pública 2022
al tener millonarios daños patrimoniales el erario público en el primer año de
gestión de sus respectivos alcaldes y alcaldesas, pero poco se ha hablado del
Ayuntamiento de Veracruz, donde "dice" gobernar Patricia Lobeira de
Yunes, la cuál salió observada con un daño patrimonial superior a los $39
millones de pesos en su primer año de gestión.
Doña Patricia parece ser que
aprendió muy rápido el camino para desfalcar a las arcas municipales sin que
pase "nada", tal como lo hizo su cuñado Fernando Yunes del 2018 al
2021 cuando logró un daño patrimonial superior a los $160 millones de pesos
detectados por el ORFIS y que al día de hoy ni ha solventado, ni han procedido
legalmente con él de forma irreal, y hasta se postula para un nuevo cargo
público en 2024 caminando tan campante por las calles de la zona conurbada
Veracruz-Boca del Río, tal como su padre lo hace.
De acuerdo con el informe de
resultados de la cuenta pública 2022, el ORFIS detectó que el ayuntamiento de
Veracruz no justificó un pago de 25 millones en la contratación de una empresa
para que hiciera las gestiones sobre una bonificación derivada de créditos a
favor.
Otra observación es por 11
millones de pesos por concepto de “arrendamiento de parque vehicular para las
diversas áreas”, ya que no presentó los instrumentos de control respectivos que
contengan las especificaciones que describan las actividades realizadas y que
justifiquen los gastos efectuados.
Este esquema de arrendamiento
de las unidades municipales ya lo llevó acabo su esposo Miguel Ángel Yunes
Márquez cuando fue alcalde de Boca del Río de 2014 a 2017, donde contrató a una
empresa de San Luis Potosí para arrendar todo el parque vehicular municipal con
su respectivo moche millonario por tal negocio con una empresa foránea, cosa
que ahora sucede del mismo modo en el Ayuntamiento de Veracruz, donde ya les
detectaron el negocio millonario.
Por lo visto la menos enterada
de lo que sucede en la administración de las finanzas municipales es la propia
Patricia Loberia Rodríguez, ya que su esposo Miguel Ángel Yunes Márquez es el
verdadero titiritero atrás de ella, y quien desde una oficina alterna y conjunta
a la de la Alcaldesa hace y deshace con el enorme presupuesto municipal que
supera los $2 mil 500 millones de pesos anuales.