Por Santiago García
Pues
bien, resulta que una de las regidoras que más dignidad y gallardía había demostrado con su forma de pensar y de
actuar, de repente decidió dar un paso al costado y echarse a los brazos
presupuestales de la alcaldesa.
Nos
referimos a la Maestra Dora Emilia Coronel Yáñez, quien se ha retirado del
grupo mayoritario para convertirse en
una nueva aliada de Blanca Lilia Arrieta.
Quienes
quieren disculparla, argumentan que no es una decisión personal suya, sino de
su esposo, el Dr. Antonio Arguello Morales, quien en la pasada contienda
electoral participó en la fórmula que representó al PAN, siendo el suplente de
Raúl Monroy, candidato a la Alcaldía y, de quien se dice, fue el verdadero
ganador de la elección, de no haber sido por el trabajo nocturno y magia que
realizaron algunos operadores del oficialismo.
El
Médico Arguello militó en el PRI, llegando a ser el presidente del Comité
Municipal y, también, se desempeñó como Director del Hospital Regional, durante
gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares.
Así
que Arguello ya fue priista, panista y hoy, parece ser, está dando viraje hacia
el morenismo, previa negociación que no
debió ser “cualquier cosa” ya que lo único que no puede argumentar es, que sea
por convicción e ideología.
Hay
quienes dicen que seguramente el Dr. Arguello obtuvo, obviamente, algo muy
significativo como para que su esposa tuviera que renunciar al bloque
mayoritario, aún a pesar de que era una de las ediles mayormente convencida de
cuestionar el mal actuar de alcaldesa
Blanca Lilia Arrieta, a la que no le importa el violentar leyes y reglamentos,
para tratar de imponer su voluntad y sus caprichos.
Hablando
de los caprichos de Arrieta pardo, nos pasaron el tips de que pronto saldrá la
resolución del TEV, en relación con la negativa de pago de honorarios a los Agentes y subagentes
municipales, conforme mandata la ley.