Desde el Café
Bernardo Gutiérrez Parra
Ahora resulta que Verónica Hernández Giadáns es lo
máximo: es la más trabajadora, la más responsable, la más cumplida, la más
eficiente, la más comprometida. Es la funcionaria que hacía falta en la
Fiscalía General del Estado. Sin duda por ello, la cúpula de Morena está
acribillando las redes sociales con boletines que resaltan el “arduo trabajo”
de la encargada de despacho en la FGE.
Raro es el día en que Verónica no aparezca acompañando
al gobernador Cuitláhuac García, o al secretario de Gobierno Eric Cisneros, en
algún evento protocolario donde cualquiera de los dos aprovecha cámaras y
micrófonos para manifestar que ahora sí, la FGE está dando resultados porque
tiene a la cabeza a una mujer que le echa ganas a su trabajo.
Más grotesca y patética la cargada gubernamental,
imposible.
Como imposible es que con un currículum profesional
ajeno al derecho penal, Verónica Hernández Giadáns se inscriba para ser titular
de una dependencia que (dicho sea con toda honestidad), le queda muy grande. Y
sin embargo se inscribió.
Entre los abogados de primer nivel que
también se inscribieron, destaca por su palmarés el doctor Gabriel Alejandro
Williams Mendoza, que se registró el 7 de mayo y al que acompañaron integrantes
de asociaciones civiles, académicas y barras de abogados que le manifestaron su
adhesión y apoyo.
Al salir del Congreso,
Williams Mendoza declaró que participa en el proceso a pesar de que la
convocatoria está viciada de origen y ha sido absorbida por un legislador a
quien no le toca decidir quiénes pueden participar en este proceso. Aunque no
dijo el nombre, quienes lo escucharon supieron que se refería a Juan Javier
Gómez Cazarín, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso
local quien, atendiendo ordenes de su jefe el gobernador, pretende imponer a
Verónica como la nueva Fiscal.
Por su parte,
integrantes de la Fraternidad de Líderes por el Bienestar de Todos pidieron a
los diputados locales “piso parejo” para todos los aspirantes.
Cesáreo López Luría,
presidente de ese organismo, dijo que el sistema de justicia en Veracruz
necesita un saneamiento urgente y eso se verá reflejado si llega a la titularidad
de la FGE una persona preparada. Agregó que tanto para él como para quienes conforman
la Fraternidad, Gabriel Alejandro Williams Mendoza cumple con todas las características que exigen los veracruzanos.
Alejandro Williams es el único de los aspirantes que ha recorrido todos
los rincones del estado para que lo conozcan los veracruzanos y se enteren de su
plan de trabajo si resulta elegido Fiscal General. Esto le ha ganado infinidad
de adeptos que le han manifestado su apoyo, no sólo de manera personal, sino en
las redes sociales.
Y fue en las redes sociales mediante un video, donde Williams Mendoza dijo
recientemente: “Juntos lograremos que la Fiscalía General del Estado sea la
institución que merecemos los veracruzanos. Una procuración de justicia
autónoma, libre, humanista, equilibrada, con verdades verdaderas y con justa
justicia. Sin excesos punitivos y sin excesos de impunidad. Pero sobre todo sin
maquillajes y sin intereses políticos”.
Es una lástima que no existan debates entre los aspirantes a la FGE,
porque ante una persona con experiencia y alto nivel académico como Gabriel
Alejandro Williams Mendoza, nada tendría que hacer la novel funcionaria
Verónica Hernández Giadáns.