IMPRONTA
Carlos Miguel Acosta Bravo*
En la
reciente medida determina de la suspensión de visas para conductores de
transporte pesado, esta afecta a algunas
categorías de visas de trabajo para choferes no mexicanos, pero según la
Secretaría de Relaciones Exteriores de México, los choferes mexicanos que
operan bajo el T-MEC con visas tipo B no se verán afectados directamente. Estas
visas permiten cruces fronterizos autorizados sin operación dentro del
territorio estadounidense, evitando la afiliación a visas restringidas. Esto
limita riesgos, pero genera incertidumbre en el sector y obliga a la mejora
continua en capacitación, como pruebas de idioma inglés y normativas de
tránsito. Respecto a la influencia de los aranceles impuestos por Trump en el
sector de autotransporte y manufacturero mexicano:
En lo
que tiene que ver con la movilidad los aranceles de EE.UU. han reducido la
operación de más de 200,000 vehículos de carga en México, impactando no sólo el
transporte transfronterizo sino también a empresas que movilizan mercancías en
la cadena productiva nacional. Esto provoca un paro superior al 50% de unidades
estacionadas y afecta severamente la eficiencia logística en sectores como el
automotriz, alimentos y manufactura. Canacar advirtió que estos aranceles
pueden ser "mortales" para la economía ligada al autotransporte si no
se negocia una solución pronta. También ha generado efectos en rutas, tarifas y
demanda de transporte.
El
robo a camiones genera enormes pérdidas y riesgos operativos; la medida de
visas impacta menos a choferes mexicanos por reglas del T-MEC pero obliga a
adaptación; y los aranceles de Trump tensan aún más la operación del
autotransporte y la manufactura, afectando la economía nacional y la cadena
logística.
El costo
anual que representa el robo de carga para las empresas de autotransporte en
México es muy significativo y alcanza miles de millones de pesos. Con un
aumento del 9.18% respecto a 2023.
De acuerdo
con CESVI México, el costo promedio por cada evento de robo supera 1.2 millones de pesos mexicanos, sin considerar daños colaterales (multas,
incumplimiento de contratos, aumento en primas de seguro, entre otros).
CONCAMIN
estima que las pérdidas anuales por robo de carga ascienden a más de 4,113 millones de dólares, equivalentes a más de 70,000 millones de pesos mexicanos, alrededor del 0.7% del PIB nacional.
Además de las
pérdidas por valor de mercancías y vehículos, las empresas enfrentan costos
adicionales por interrupciones, rescates, deterioro de activos, aumento en
gastos de seguridad y daño reputacional.
Las zonas con
mayor incidencia de robos son: Estado de México, Puebla, Guanajuato, Michoacán
y Jalisco, afectando especialmente cadenas productivas estratégicas como la
automotriz, alimentaria, química y electrónica.
En lo que va
de 2025 ya se reportan más de 12,000 incidentes con tácticas delictivas cada
vez más sofisticadas, como bloqueo falso, uso de inhibidores de señal GPS y
secuestro exprés de operadores.
El costo
económico anual estimado por robo de carga en el sector autotransporte en
México supera ampliamente los 70,000
millones de pesos, una cifra
que impacta fuertemente en la competitividad, seguridad y estabilidad logística
nacional.
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a:
*Maestro en
comunicación por la Universidad Iberoamericana, de la que formó parte del
cuerpo académico de la Licenciatura en Comunicación, así como de la Universidad
Anáhuac, campús norte de la CDMX.