Desde el Café
Bernardo Gutiérrez Parra
Una nota firmada por el periodista Francisco Licona,
señala que ya prácticamente todo está decidido en el PRI nacional para el
destape del secretario de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña, como
candidato de ese partido a la presidencia de la República.
Según el maestro Licona, el arroz ya se coció.
Si Meade es el elegido, don Paco no habrá descubierto
el hilo negro ya que el nombre del responsable de las finanzas nacionales anda
en boca de casi todo mundo desde hace meses.
Lo interesante de su análisis es que Aurelio Nuño
Mayer, el secretario de Educación Pública, iría como su coordinador de campaña,
mientras que el titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio
Chong, sería nombrado líder nacional del PRI.
El razonamiento suena bastante lógico si tomamos en
cuenta que, a pesar del buen papel que ha desempeñado Osorio Chong al frente de
la Segob, la violencia en algunas regiones de la República ha jugado en su
contra.
Además, lo que necesita el país es un administrador y
nadie mejor que Meade. Otra cosa que juega a favor de éste es que como no es
priista, no tiene cola que le pisen y su hoja de servicios es intachable. Tan
es así que muy pocos tricolores objetarían su candidatura.
En el caso de Aurelio Nuño, deberá poner en juego todo
lo que esté a su alcance para brindar su apoyo a Meade, y no convertirse en una
figura decorativa como lo fue Ernesto Zedillo como coordinador de la campaña de
Luis Donaldo Colosio.
Una cosa que deberá cuidar el aún titular de la SEP son
sus amistades. Nuño es súper amigo Alberto Silva Ramos que ha de estar
frotándose las manos y desempolvando los artilugios que acostumbra utilizar en
las guerras de lodo electorales.
Nada como mantenerlo a distancia, porque amigos como
el tuxpeño le restarían puntos a Meade sobre todo en Veracruz, donde casi nadie
tiene buenas referencias del diputado federal y donde los priistas no quieren
saber nada de él.
Y hablando de Veracruz ¿que pasará con el PRI estatal?
Pues pasará lo que tiene que pasar; Renato Alarcón
Guevara se irá y vuelve a sonar el nombre del alcalde xalapeño Américo Zúñiga para
ocupar su lugar.
Américo ha hecho un excelente papel como alcalde, tiene
buena imagen entre los priistas veracruzanos y es amigo de Meade y Osorio
Chong.
Pero si no es Américo, el PRI nacional deberá tejer
muy fino y no nombrar a un cartucho quemado porque de lo contrario… ¡aguas!
Por otra parte, todo indica que también se coció el
arroz con la candidatura a gobernador que recaerá en manos de José Yunes
Zorrilla, amigo de Meade, de Osorio Chong, de Américo Zúñiga y de Luis
Videgaray por lo que pudiera ofrecerse.
Al parecer, así estará conformado el tablero priista a
nivel nacional y en Veracruz para las elecciones del 2018.
¿Qué te parece, lector?