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Obras de
Moncayo, Chávez, Lara y Rosas.

Xalapa, Ver., 14 de septiembre, 2021. Año tras año, la
Orquesta Sinfónica de Xalapa (OSX) de la Universidad Veracruzana (UV) celebra
junto con su público de una increíble y mexicana noche de concierto con el fin
de conmemorar nuestra Independencia con un repertorio de música compuesta por
mexicanos.
Con un concierto de 2016, la OSX transmitirá este
miércoles 15 de septiembre en su canal de YouTube y Facebook oficial (@OSXUV)
en punto de las 20h30, este Concierto Mexicano, que cuenta con la dirección del
Mtro. Lanfranco Marcelletti Jr., quien fuera Titular de la OSX de 2012 a 2019 y
le brindara un aire fresco y juvenil tanto a la orquesta, como a la música
sinfónica, y quien fuera también responsable de acercar a la Orquesta y músicos
a la ciudadanía xalapeña.
CONCIERTO MEXICANO
Carlos Chávez afirmó sobre la Obertura Republicana que la
idea fue tan solo instrumentar decorosamente algunas piezas populares de cierto
carácter, para llevarlas al salón de concierto. Por lo demás, las marchas
mexicanas de esa época no podían ser cosa muy distinta de las francesas y
austriacas; lo mismo puede decirse en general de los valses, aunque el
interpretado aquí tiene carácter bastante mexicano. La obra, en su forma
particular, es un proceso de la marcha gallarda al vals sentimental de nuestra
vida republicana, que se resuelve en el canto porfiado, obstinado y belicoso de
nuestra última revolución. La Obertura
Republicana (Chapultepec) fue
estrenada el 18 de octubre de 1935 en el Palacio de Bellas Artes de la Ciudad
de México.
En el año de 1949, la Orquesta Sinfónica de México
convocó a un concurso de composición para conmemorar el centenario de la muerte
de Frédéric Chopin, y la obra triunfadora de ese concurso fue Tierra de Temporal. Malacostumbrados
como estamos por la omnipresente sonoridad del Huapango (1941) del propio Moncayo, quizá imaginar que Tierra de Temporal es una obra
igualmente extrovertida y brillante. Sin embargo, no lo es. En esta partitura,
Moncayo transita por caminos musicales que avalan lo dicho por el musicólogo
sueco Dan Malmström en el sentido de que Tierra
de Temporal es mucho más nacionalista en su título que en su música. ¿Qué
hay, entonces, en esta pieza sinfónica de Moncayo?
Sorprendentemente, hay un lenguaje que, sin dejar de
ser identificable como mexicano, tiene claros contornos impresionistas que le
dan una delicadeza muy peculiar y atractiva. Esto no deja de ser interesante,
sobre todo a la luz del hecho de que Moncayo, a diferencia de algunos de sus
colegas, no tuvo oportunidad de “afrancesarse” a través de los estudios
musicales en Europa. Así pues, Tierra de
Temporal se mueve en un ámbito sonoro que, sin dejar de ser mexicano,
apunta hacia horizontes más universales.
En 1887, el compositor guanajuatense Juventino Rosas
(1868-1894) escribió el vals con el que pasó a la historia de la música de
concierto mexicana: Sobre las olas.
Originalmente la pieza se llamaba A la
orilla del arroyo o Junto al
Manantial porque, según cuentan algunas de las diversas anécdotas que
existen al respecto, el músico se había inspirado en la figura de su enamorada
(Mariana Carvajal) que estaba lavando ropa en un arroyo. Otra versión, menos
romántica pero más poética, afirma que en realidad lo que inspiró al compositor
fue el suave vaivén del agua del río Magdalena (en la actual alcaldía Magdalena
Contreras, donde Rosas vivió un tiempo). Cualquiera que haya sido su origen, lo
cierto es que Sobre las olas conoció
un éxito sin precedentes.
Ángel Agustín María Carlos Fausto Mariano Alfonso del
Sagrado Corazón de Jesús Lara y Aguirre del Pino, conocido como Agustín Lara,
fue un compositor e intérprete mexicano de canciones y boleros. Se le reconoce
como uno de los más populares de su época y género. También conocido con los
apelativos de El Músico Poeta y El Flaco de Oro, su obra fue ampliamente
apreciada no solo en México, sino también en Centroamérica, Sudamérica, el
Caribe y España. Luego de su muerte, se le ha reconocido también en Estados
Unidos, Italia y Japón, y de quien escucharemos un popurrí de danzones con
arreglos de Chucho Ferrer, quien se considera un icono de la historia de la
música popular en México, ya que realizó más de 8000 arreglos musicales para
artistas de diversos géneros que van desde el bolero, el rock, el ranchero, la
balada y la música clásica entre otros.
Sones
de Mariachi es una pieza para
gran orquesta del compositor mexicano Blas Galindo publicada en 1941. Esta
pieza es una reescritura de su obra anterior Sones Mariachi para pequeña orquesta de 1940, elaborada con motivo
de la exposición 20 Siglos de Arte
Mexicano que se efectuó en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, para el
programa de música mexicana que dirigió el conductor y compositor Carlos Chávez.
La obra, cuyo título evoca las jugosas melodías que tocan los conjuntos
instrumentales folclóricos llamados mariachi, está basada en tres piezas: Son de la Negra, El Zopilote y Los Cuatro
Reales.
Y, para finalizar, el compositor y pianista Eugenio
Toussaint dejó un importante legado, constituido por piezas de jazz y música de
concierto. En el año 1999 compone el Popurrí
Pérez Prado Op. 38, una breve obra para orquesta sinfónica. Es una
adaptación de los mambos del famoso compositor de origen cubano Daniel Pérez
Prado, nacionalizado mexicano. El mambo tiene sus orígenes en el danzón cubano
y luego siguió su evolución dando lugar al chachachá y finalmente a la música
salsa. Su ritmo sincopado aparece como una influencia de la música de jazz.
La OSX
recuerda a su público que los esperamos ver pronto en nuestra sala de
conciertos de Tlaqná, Centro Cultural, por lo que es importante que se
mantengan con protección para que pronto podamos salir de nuevo.
Pie de
foto: Concierto Mexicano ©Orquesta Sinfónica de Xalapa.