Este sábado por la mañana agentes de la Policía Ministerial detuvieron en Tuxpan a Rogelio Franco Castán, ex secretario de Gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares, acusado de violencia intrafamiliar por quien fue su esposa, la señora Guillermina Alvarado. Esto a pesar de que traía un amparo en la bolsa que por lo visto no le sirvió de mucho.
Según el informe de los ministeriales y a reserva de comprobarse,
el también ex líder estatal del PRD y aspirante a una diputación federal, se
les puso sabroso y rompió la orden de aprehensión que le mostraron. Por lo que si
no lo detuvieron por violencia intrafamiliar, sí lo hicieron por ultrajes a la
autoridad, delito considerado grave en la reciente reforma al Código Penal.
En contrapunto, la defensa de Rogelio declaró que su
detención fue ilegal y muy parecida a un levantón.
Viviana y Luisa, dos de sus tres hijas, subieron un
video a las redes donde le piden a su madre que ya deje de molestar a su papá:
“Estamos muy dolidas y además, nos sentimos inseguras. Varias veces recibimos
amenazas por parte de nuestra madre, Guillermina Alvarado, para que no
hiciéramos más pública la verdad de esta pesadilla que nos ha obligado a vivir…
Por favor, mamá, este mensaje es para ti: déjanos vivir en paz. Vive tu vida y
déjanos a nosotras estar con nuestro padre; lo necesitamos”.
La señora Guillermina Alvarado, también subió un video
donde pide ayuda al Presidente López Obrador, al gobierno estatal y acusa al
PRD de tomar represalias contra ella y poner en duda su “situación de
violencia”. Además, recrimina la falta de apoyo de las mujeres que están contra
la violencia de género.
Sin pretender defender a Rogelio hay algo de truculento
en la acusación, porque la señora lo señaló de haberla agredido físicamente en
2016 e incluso subió unas fotos a las redes donde aparece golpeada. Pero en
2017 no sólo desmintió la agresión, sino que acusó a “alguien” de publicar esas
fotos con la aviesa intención de “denostar el ámbito político veracruzano (sic)”.
El asunto es que pasó el 2018, el 2019 y el 2020 y aparentemente
no se volvió a acordar de aquello. Hasta este año en que desempolvó la denuncia;
cuando faltan 82 días para las elecciones y el cielo amenaza con venírsele
encima a Morena, al menos en Veracruz.
En fin, el caso es difícil y debería resolverlo un
juez de lo familiar porque hay tres menores en medio de la trifulca. Pero lo llevará
un juez de distrito que seguramente pasará por alto la acusación de violencia
intrafamiliar, para empujarle a Rogelio un año de prisión preventiva por ultrajes
a la autoridad, con lo que lo dejará sin posibilidades de ser nuevamente
legislador.
Más allá del pleito entre el tuxpeño y su ex mujer,
casi nadie duda que detrás de esta detención estaría el brazo ejecutor del
Secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, quien habría convencido a la señora
de demandar penalmente a su ex marido.
Por lo que hace al mundillo político veracruzano,
nadie se tragó el anzuelo de que al perredista lo aprehendieron por violento y
golpeador. Sino que fue la respuesta del gobierno estatal al ácido epíteto que
el alcalde de Veracruz Fernando Yunes Márquez, le soltó al gobernador
Cuitláhuac García, después de que éste acusara a su suegra de presentar
documentación falsa para vacunarse contra el Covid.
Para nadie es un secreto que Rogelio es el perredista
más yunista de la entidad, además de operador político de Yunes Linares, por lo
que su detención le tuvo que pegar forzosamente tanto al ex gobernador como a
sus vástagos. Pero el golpe fue más allá.
El 6 de este mes Cisneros Burgos dijo amenazante que el
Ejecutivo estatal “no quiere delincuentes en ningún partido político”, y se
ejecutarán detenciones contra alcaldes y regidores si se presume que están
coludidos con los malosos.
Esto tiene con calambres a los munícipes del PRI, PAN
y PRD, no porque necesariamente anden en malos pasos, sino porque saben que la
ecuación es muy simple. Bastará con que alguno no se pliegue a las órdenes de Eric
para que le organicen un juicio de procedencia fast track y… a Pacho Viejo.
“Si se atrevió con un ex secretario de gobierno, qué
podemos esperar nosotros”, me comentó preocupado un alcalde de la oposición.
¿Qué esto no es violatorio de la Ley? Por supuesto que
sí, pero a ver qué guapo se lo hace ver a los señores de la 4T, sin riesgo de
que le armen una carpeta de investigación con orden de aprehensión y toda la
cosa por ultrajes a la autoridad.
Sobre la detención de Rogelio que –reitero- muchos la ven
como la venganza de Cuitláhuac al “estúpido” que le endilgó Fernando Yunes, el reconocido
periodista y analista político Filiberto Vargas Rodríguez me dijo: “A ver, ¿te
da una bofetada el dueño del carro y te desquitas con el chofer?”
En otro país no mi querido Fili, pero en México y muy
particularmente en Veracruz sí, vaya que sí. Si alguien lo duda, que le
pregunte a Rogelio Franco.